Entusiasta de la isla y residente permanente desde 2019, divide su tiempo entre dos proyectos que comparten su deseo de potenciar y promover un enfoque agrícola basado en el respeto por el ecosistema en Ibiza. Con una formación alejada de la agricultura formal (pese a que algunos de sus antepasados trabajaron en el sector), Jessica ha decidido involucrarse de lleno en este sector, con el objetivo de fomentar la restauración del equilibrio biológico de los campos agrícolas, utilizando métodos experimentales que están actualmente en desarrollo.
Miembro activo de APAEEF (Asociación de Productores de Agricultura Ecológica de Ibiza y Formentera por sus siglas en ibicenco) ha puesto en marcha varios proyectos como el Banc de Terres (banco de tierras), una iniciativa de gestión agroecológica cuyo fin es la puesta en valor sostenible de las tierras de cultivo abandonadas barbecho. Con estos productores ibicencos, realiza una práctica de mentoría que incluye muchos aspectos diferentes: desde la ubicación de estas tierras ahora inactivas y su conexión con estos productores interesados, hasta ayudas económicas, creando espacios de diálogo donde se pueden compartir buenas prácticas entre agricultores, a la formación en técnicas para conseguir un formato viable a nivel ecológico y económico.
Paralelamente, Jessica Dunlop desarrolla Can Purtell, cuyo principal objetivo es establecer diversas especies de cultivos forrajeros perennes y anuales, adaptados al clima de Ibiza, para regenerar suelos y proporcionar al ganado una nutrición óptima y una dieta equilibrada en minerales, teniendo en cuenta la escasez de agua del clima pitiuso, entre otros importantes condicionantes.